Ferit organiza una deslumbrante fiesta de Año Nuevo que parece sellar la reconciliación entre las familias. Animado por el éxito de la noche, el joven Korhan cree que finalmente logrará acercarse a Seyran de manera definitiva. Sin embargo, sus ilusiones se desvanecen cuando ella solo le da un beso en la mejilla antes de ir a dormir.
Más tarde, al darse cuenta de que olvidó su teléfono en el coche, Ferit baja a buscarlo. Allí lo encuentra Sultán, quien aprovecha la oportunidad para abrazarlo, sin darse cuenta de que Yusuf está observando la escena desde las sombras.
Mientras sube las escaleras, Ferit se topa con una visión inquietante: su padre, Orhan, en una actitud comprometida con Ifakat. Aunque las dudas lo invaden, decide no confrontarlos en ese momento.
A la mañana siguiente, Yusuf contacta a Seyran para insinuarle una relación entre Ferit y Sultán. Aunque inicialmente escéptica, Seyran queda intrigada y comienza a indagar. Durante el desayuno, ambos reciben la aprobación de Halis para asistir a una sesión de fotos organizada por Defne, una carismática amiga de Gülgün y exnovia de Orhan. La sesión no solo revela la arrolladora personalidad de Defne, sino también antiguos resentimientos que chocan con Ferit.
Por la noche, tras descubrir la relación entre Orhan e Ifakat, Ferit cambia de opinión y acepta la invitación de Defne a una fiesta. Lo que comienza como un intento de olvidar sus problemas rápidamente se descontrola. Ferit, consumido por el alcohol, confiesa a Seyran lo que sabe sobre Orhan e Ifakat, solo para descubrir que ella ya estaba al tanto. La discusión escala y Ferit, en un arranque de ira, busca consuelo en Defne.
La noche culmina con un impactante giro: Ferit termina en casa de Defne, donde lo espera una sorpresa inesperada… ¡Seyran también está allí! ¿Qué consecuencias traerá este explosivo encuentro?