Damián le pagó una importante suma de dinero a Santiago para que retirase la denuncia contra Fina y desapareciese para siempre, pero a Marta eso no le vale. Quiere que ese hombre pague por haber intentando violar a Fina cuando estaba en prisión.
La joven De la Reina se cita con él y le exige que se entregue a la guardia civil por intentar violar a Fina: “tienes que pagar por ello”.
Santiago le responde que eso no es verdad y empieza a sospechar si Marta también odia a los hombres.
“Entrégate, canalla”, le dice Marta muy enfadad, pero Santiago no piensa mover un dedo y tiene claro que se irá a Canarias.
Ante su negativa, Marta toma una drástica decisión. Llama a un matón para que le de un susto a Santiago: “Ya sabes lo que tienes que hacer”.